La batalla de los asistentes virtuales
En 2015, Amazon dio a luz el Echo, el altavoz con inteligencia artificial que presentó la asistente virtual conocida como Alexa. Un año más tarde, Google respondió con Home, su altavoz inteligente que es controlado por el compañero digital de Google, llamado Asistente.
Desde entonces, en una competencia por volverse tu compañero digital de confianza, los dos gigantes tecnológicos han hecho equipo con fabricantes de dispositivos como termostatos, timbres para puertas, bombillas y accesorios para autos con el fin de agregarles sus asistentes virtuales.
Se espera que este año Google sea aún más agresivo con su Asistente. En 2019, la empresa triplicará el tamaño de su presencia en la CES, lo cual sugiere que probablemente desvele una enorme serie de productos que funcionan con el Asistente.
"En realidad nos decantamos por el Asistente como la mejor manera de hacer las cosas, pues te ayuda a hacer un montón de tareas mientras llevas a cabo tu día", comentó Nick Fox, un ejecutivo de Google que supervisa el proyecto del Asistente.
Amazon afirmó que la próxima semana también presentará una amplia gama de tecnologías que funcionan con Alexa, como parte de un concepto que llama Alexa Everywhere. El objetivo de la empresa es expandir el alcance de su asistente virtual a cada una de las partes de la vida de las personas, como la cocina, la sala de estar, la oficina y el auto.
Para ti y para mí, una advertencia: los asistentes virtuales siguen en sus primeros pasos y tienen muchas desventajas. Debemos decir comandos muy específicos para lograr que un asistente virtual controle un dispositivo, como establecer la temperatura de un termostato o apagar una lámpara. La gente que no está familiarizada con la jerga podría considerar que los dispositivos son incluso más difíciles de usar que presionar un botón en una aplicación.
"Aún debemos aprender su idioma y ellos no han aprendido el nuestro", opinó Frank Gillett, un analista de tecnología en Forrester, una empresa de investigación del sector tecnológico.
Lo que se pierde en el sensacionalismo sobre los asistentes virtuales es si en verdad la gente desea un compañero omnipresente que se involucre en sus tareas del día a día. Lo más común es que los dueños de los altavoces inteligentes convoquen a los asistentes digitales para funciones básicas como escuchar música, revisar el clima y poner una alarma, de acuerdo con una investigación que realizó Nielsen el año pasado.